Volátame las ataduras

¡La hemos vuelto a hallar! 

¿Qué? 

La Eternidad.... 

Es la mar mezclada con el sol.

                                      Arthur Rimbaud

Casa de Campo, marzo 2015

Descorchó mis labios en sonrisas,
y mi cuerpo se llenó de convulsión.
Estremecida entre cromatismos mudos,
sentí una enredadera de seísmos
entre mi todo y mi nada - ¿Amanecí?

Cuidado, no cruces los días sin mirar,
pasan los instantes como dragones.
Bien lo sabes;
                  el futuro: puro vértigo.

Entre los abetos de tu pelo busqué
certidumbres de luz y tul. Y hallé
sobresaltos que siempre apuntaban al sur
de tus hiperbólicas constelaciones.

El temblor disparó el lanzallamas y
nos desarticulamos en gotas indeterminadas,
¿Cuáles son las formas o colores del amor?

Sólo veo un cielo azul que me nombra...
Y el fulgor de unos ojos que me atrapa.

Tú y yo; dos definiciones en pretérito imperfecto.
Déjame llenar tu piel de ejemplos,
en este empeño por apuntalar la síntesis en la pared.
                                                     
                                Y sólo así,
con la punta de mi dedo cómplice
detallar el contorno de nuestros dos cuerpos,
                                            abrazados,
                                                      libres,
                                                          elevados.

Gema

Ya no quiero pensar más en lo que me estoy perdiendo. Nos podemos pasar la vida pensando que nos gustaría estar en otra parte, pero es absurdo, es pura arrogancia, sólo te hace ser infeliz, te lleva a la frustración permanente. Ya no quiero ver la vida así, me gustaría ser más feliz y disfrutar lo que tengo. Empezar por ahí, al menos.

[Todas las canciones hablan de mí]